martes, 12 de enero de 2010



LITURGIA DEL CREPÚSCULO



PATA DE GALLO EN SEDA NATURAL





PATA DE GALLO EN SEDA NATURAL



Ya sé que esto no cuadra.

Que soy una cana teñida,
una pata de gallo con juanetes.

Me mato a matahambres
para suicidarme en la báscula
cada semana.

A veces me miro en el espejo
y no me reconozco.

Por eso es normal que vaya por ahí
con reivindicaciones y pancartas .

Me gustan las montañas rusas
y los autos de choque y
hasta de buena gana
me tatuaría una mariposa en el ombligo.

Todavía me escribo cartas

desde lugares lejanos

para darme sorpresas al regreso.


Y si un poeta me deja escrito

en un e-mail su rastro de versos

o el icono de una rosa;

me descorcho botellas de champán

y me convido.


Hablo con los gatos,

beso a los conejos de indias

y echo migas de pan a las hormigas del bosque.


Eso no es serio, ya lo sé.

Debería ser más formal

y haber escarmentado con los años.


¡Pero qué le vamos a hacer!

¡Si tengo este corazón bohemio

y voy escarmentada de amarguras !